Asesoramiento, puntual o continuado, de un despacho de abogados a la central franquiciadora para asistirla y optimizar la elaboración y actualización de su documentación jurídica, adaptar los documentos contractuales a los acuerdos establecidos en los procesos de negociación y, en general, ejercer la defensa legal de sus intereses frente a terceros. Esta consultoría jurídica puede realizarse igualmente a un potencial franquiciado a efectos de analizar la conveniencia legal del contrato de una franquicia cuyos derechos pretenden adquirirse.