Capacidad de una persona o entidad para dar cumplimiento a los objetivos que se propone o se le asignan. Es una cualidad empresarial que debe mostrar el franquiciado y que es especialmente analizada por el franquiciador con anterioridad a la concesión de los derechos de franquicia. En todo caso, en una actividad franquiciada, en clara ventaja frente a una de carácter independiente, la interrelación entre franquiciador y franquiciado y el apoyo en la gestión que este último recibe, le otorgan más posibilidades de alcanzar objetivos establecidos y por ello le facultan a una gestión más eficaz.