Conjunto de decisiones y medidas que tienen por objeto la reestructuración de activos y pasivos para revertir una situación económica negativa y, en general, mejorar la situación de la empresa. Pueden consistir en la venta de activos improductivos u obsoletos, abandono de proyectos y líneas de negocio, amortizaciones de deuda y activos ficticios, ajustes de plantilla, supresión, ajustes y optimización de líneas de gasto, reducción de estructuras de mercado y cierre de plantas de producción, centros de distribución o puntos de venta, etc.